De acuerdo con la Asociación de Cerveceros de la República Mexicana, en México la cerveza comercial paga alrededor de $3.50 de impuestos por litro y la cerveza artesanal entre $10 y $12 por litro.
De un tiempo a la fecha tomar cerveza artesanal se volvió in para un sector de la población. Quienes pueden pagar entre 50 y 100 por una cerveza, aproximadamente, argumentan que la variedad y sabor de este tipo de bebidas espirituosas es mejor que el de las marcas comerciales. El resto de los mortales –aún cuando coincida en que el sabor es bueno- piensa que su precio es alto. Los cerveceros artesanales aseguran que no hay forma de competir en precios con Corona o con Tecate.
¿Por qué es tan cara la cerveza artesanal?, ¿Por qué una cerveza de este tipo puede costar dos o tres o cuatro veces más que una cerveza comercial?, ¿Por qué no bajarlas de precio?
La respuesta está en los impuestos. De acuerdo con la Asociación de Cerveceros de la República Mexicana (Acermex), en otros mercados como Estados Unidos, la cerveza comercial paga alrededor de 2.50 pesos por litro y la cerveza artesanal paga 1.24 pesos por litro.
En México, la cerveza comercial paga alrededor de 3.50 pesos el litro, y la cerveza artesanal entre 10 y 12 pesos por litro. La ley actual del Impuesto Especial sobre Producción y Servicios (IEPS) grava a todas las cervezas con el 26.5 por ciento sobre el precio de venta (antes de IVA). Este esquema de tributación fue adoptado cuando en México solamente existían unas cuantas empresas que producían en grandes cantidades de cerveza, con procesos muy eficientes y con costos de producción muy bajos, por lo que sus gastos en general, procesos e incluso la rentabilidad de dichas empresas era muy similar. Había terreno parejo para todos.
Sin embargo, desde hace poco más de 15 años surgió en el país un mercado interesado en producir y degustar otro tipo de cervezas. Cervezas de estilos europeos, cuyo proceso de elaboración se realiza en pequeñas cantidades y con los cuatro ingredientes básicos de esta bebida: agua, malta, lúpulo y levadura, además de uno que otro insumo de especialidad. Pequeñas y medianas cervecerías decidieron entrar al mismo terreno que hoy controla Grupo Modelo y Cuauhtémoc-Moctezuma. El terreno ya no es parejo.
Las grandes cerveceras emplean en su producción insumos derivados del maíz, arroz y otras fuentes de azúcares, diferentes a la malta de cebada o de trigo, para abaratar el producto final y eficientar el proceso de producción o la vida de anaquel del producto. En el caso de los cerveceros artesanales, utilizan 100 por ciento malta de cebada o de trigo para constituir los azúcares fermentables y dar cuerpo de la cerveza, por lo que sus costos de producción “pueden estar entre 4 y 6 veces por encima de los costos de producción de las grandes cervecerías”, explica la Asociación de Cerveceros de la República Mexicana (Acermex).
A esto se suma el hecho de que las maltas de especialidad, de la mayoría de las cervezas artesanales, provienen de países Europeos y del Norte o Sur de América, por lo que la importación de dichos insumos se acumula al costo de producción. “Como resultado de lo anterior la cerveza artesanal tiene una base gravable mucho más amplia que la cerveza industrializada. Ocasionando que el consumidor tenga que pagar un impuesto neto desproporcionalmente alto comparado con el que paga por consumir una cerveza de bajo costo. Lo cual desincentiva de forma más fuerte el consumo de los productos artesanales”, explica Paz Austin, directora de Acermex. La propuesta de los cerveceros artesanales es establecer un impuesto por cuota fija que grave a cada unidad (litro) comercializada de cerveza con un monto determinado en pesos, de alrededor de 3.50 pesos por litro, lo que ayudaría a que estas bebidas tuvieran un precio mucho más competitivo en el mercado.
Fuente: https://www.milenio.com/negocios/por-que-la-cerveza-artesanal-es-tan-cara